5 de septiembre de 2010

Trazos de un verano que se acaba

Desde hace cuatro años acudo al encuentro de la España profunda. Acudo a las fiestas de un pueblecito del Bierzo. Para mí, la llegada de ese fantástico fin de semana, lleno de comidas pantagruelicas, cremas de orujo, paquito el chocolatero, vino cabezón y la familia de F, me hace sentir que el verano toca a su fin, porque después solo queda Madrid y la perspectiva de volver a empezar con las obligaciones del año.
Una vez que ya habíamos disfrutado de las bodegas, de la buena comida y la buena bebida, de la música de la charanga que llegó tarde y de todo lo demás, volvíamos a Madrid en el coche. Yo iba sentado atrás y a mí derecha, un espectacular sol que se ponía, dejaba un cielo que parecía que sangraba, era una espectacular explosión de colores que se fueron apagando. Esa imagen me recordó que se acababa el verano y me puse a pensar en todo lo que tenía que hacer y en cómo iba a organizarme. Al cabo de un rato de pensar en el futuro inmediato, la música que se oía de fondo me llevó a recordar el pasado más reciente, es decir, en como se había pasado este verano.
Todo el mes de Julio en Aranjuez trabajando. Sus fiestas y sus madrugones. Las repetitivas comidas en los restaurantes. Toda la gente que se conoce en unos Cursos de Verano. El mes de agosto con sus días en Valencia. Fiesticas en la playa y en el puerto de Valencia. La bicicleta. Las buenas películas, a las que me estoy aficionando cada vez más. Libros. Amigos que se van y otros que vuelven. Deporte y más deporte. Pensando en todo y en nada una y otra vez. Posibles proyectos...
Todo un verano que se aleja y que queda en la memoria, mientras que otro "año" se acerca rapidamente e intento todavía aclararme para ver como saldrán las cosas.
Hasta que lo consiga, me aseguro a mí mismo que volveré a tomar con brío el blog y que volveremos a escribir al menos tanto como antes, intentando que al menos sea tan bueno como siempre (eso como píldora de amor propio, que nunca viene mal).
¡El espectáculo debe continuar!

2 comentarios:

  1. Pues, si te soy sincero... para mí las fiestas de T.C. son El Verano: siempre trabajando hasta que... ¡llegan las fiestas! Para ti es el final, para mí lo único que hay de verano.

    Por otra parte, se nota mejora en el estilo...

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  2. Querido Wesley, todo es una cuestión de perspectiva, creo yo.
    Por otro lado, te agradezco tu reconocimiento a mi estilo, todo un honor viniendo de quien viene;D

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